Cartagena es un destino paradisíaco gracias a su arquitectura, paisaje costero y clima cálido, serenado por la brisa del mar Caribe. Todo esto parece confluir en este apartamento de 700 metros cuadrados, ubicado en la bahía de Bocagrande, donde la amplia selección de materiales ha permitido crear numerosos contrastes y hacer de este un lugar con carácter, que impacta los sentidos.
Muestra de ello es este espacio, un comedor auxiliar que se aloja en la cocina y cuyo diseño interior cautiva por sus cualidades materiales y formales. Esta es una familia numerosa, pero además muy activa y viajera, por lo que incluir dos comedores no parece redundante ni excesivo.
“Desde un comienzo tuve claro que era una oportunidad única para hacer algo distinto, algo que se apartara del modelo tradicional de vivienda cartagenera”, comenta el diseñador de interiores Camilo Sighinolfi, autor del proyecto.
La arquitectura del apartamento
Por un lado, los acabados son artesanales: el piso es a base de mármol de Carrara, piedra de origen natural que posee numerosos atributos físicos, entre los que se destaca la presencia de un blanco que carece —casi por completo— de vetas.
En este caso, las piezas escogidas son blancas y negras, con el fin de crear un rico contraste; además, se ensamblaron a mano, lo que le aporta un enorme valor al piso, dado el gran trabajo que conlleva. Adicionalmente, la pared del fondo se revistió con listones de madera pintados con poliuretano tipo high gloss, que brinda un acabado brillante y sofisticado.
Por otro lado, el mobiliario se importó en su mayoría desde Europa: la mesa es de la marca Emmemobili y las sillas provienen de dos empresas distintas, Arflex y Baxter. La lámpara de techo es de Ghidini Italia y la obra de arte es del artista colombiano Rafael Gómez Barros.
La exaltación de materiales de distinto origen —ensamblados artesanalmente—, así como la paleta cromática variopinta y las formas geométricas puras, definen este espacio, que, aun cuando se supone que es de carácter secundario, resalta como si fuera el verdadero protagonista.
