En medio del debate sobre la restricción del uso de vehículos particulares en horas pico en las ciudades, la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos) advierte sobre los posibles inconvenientes y desafíos que podrían surgir debido a esta medida, especialmente en aquellas donde el transporte público es insuficiente y/o inseguro.
La falta de transporte público seguro, cómodo y eficiente para los ciudadanos impulsa un mayor uso de vehículos individuales (automóviles particulares o motocicletas) para desplazarse diariamente desde el hogar hasta los lugares de trabajo u otras actividades en comparación con otras ciudades del mundo donde la cantidad de vehículos per cápita es mucho mayor que en Colombia.
Si bien es indiscutible que promover modos de transporte sostenibles y reducir la congestión vehicular son objetivos valiosos y necesarios para mejorar la calidad de vida, es imprescindible considerar cuidadosamente las implicaciones de restringir el uso de todos los vehículos particulares, especialmente durante las horas pico.
Durante estos momentos, la oferta de taxis no es suficiente para satisfacer la demanda, lo que hace que el uso de vehículos particulares sea necesario. Además, otras alternativas de transporte, como caminar o andar en bicicleta, no son viables en todas las necesidades de desplazamiento.
Andemos destaca que restringir el uso de todos los vehículos particulares en horas pico sin realizar un análisis exhaustivo de las deficiencias del transporte público podría generar una serie de inconvenientes para la población.
Por ejemplo, aquellos que dependen de sus vehículos para llegar al trabajo, llevar a sus hijos a los colegios o realizar tareas diarias se verían gravemente afectados.
Además, grupos vulnerables como personas mayores o con movilidad reducida podrían enfrentar dificultades para acceder a servicios esenciales o participar plenamente en la vida social.
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